Beisbol Cubano

Saturday, May 19, 2007

Industriales dio un zarpazo apoyado en Asley

CON 93 lanzamientos, la mayoría sliders con excelente control, el zurdo Asley Sánchez se metió en el bolsillo a Santiago de Cuba, neutralizado en tres aislados hits, mientras recibía ocho ponches y un boleto, consiguiendo para Industriales el primer triunfo en la gran final ante aproximadamente 47 000 espectadores en el Latinoamericano.«Perdimos ante un gran pitcher, que en todo momento puso en práctica todos los recursos necesarios para dominarnos. Industriales demostró que es un rival duro de pelar; esta noche defendió muy bien y mereció la victoria», afirmó a este redactor el manager Antonio Pacheco, quien aseguró para este domingo al gigante Ormari Romero.Solo Reinier Mustelier y Rolando Meriño (doblete en el séptimo) pudieron llegar a la intermedia, durante el trabajo del endemoniado zurdo, con siete estrucaos repartidos entre Reutilio Hurtado (3) y dos per cápita a Alexei Bell y Maikel Castellanos. Para Industriales resultó la cuarta victoria en la actual temporada a costa de los indómitos de Pacheco, en nueve enfrentamientos, además la segunda lechada, la otra cargada al brazo de Deinys Suárez, 1x0, en el Moncada. Asimismo, marcó la duodécima sonrisa en 22 choques de postemporada. Mustelier lo hizo en el primero, cuando su roletazo por tercera ganó categoría de hit y Olivera lo llevó a la intermedia con sacrificio, resultando sorprendido por Asley en intento de ganar la antesala. En definitiva Bell abanicó. Por otra parte, Meriño quedó congelado en la intermedia, al perecer Luis M. Navas en línea al antesalista y Hurtado atragantarse el tercer ponche, con pelotazo intercalado a José J. Ruiz.El siniestro no salió en el octavo; Odrisamer Despaigne lo reemplazó y tras retirar fácilmente a Alexander Jorge y Maikel Castellanos, perdió el control y transfirió a Mustelier y Olivera, e incluso le tiró dos bolas a Bell.En esta peligrosa situación, Anglada recurrió a Frank Montieth, el que completó el boleto. Vino entonces una débil línea de Meriño, la cual obligó al torpedero Rudy Reyes a saltar como un felino para atraparla y así cercenar las amenazas postreras de las Avispas.

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